Estamos viviendo una situación excepcional que nunca antes se había dado y ante la evidencia de los hechos, no nos queda más remedio que adaptarnos (y protegernos).
Una de las cosas que defiendo siempre es la de hacernos muy amigos de la palabra «resiliencia», que es la capacidad que tenemos los seres humanos de adaptarnos de una manera positiva a situaciones adversas.
La virulencia del coronavirus ha hecho que, de repente, nos tengamos que adaptar a situaciones novedosas y además en un tiempo récord.
Y en lineas generales la gente está respondiendo con una gran dosis de concienciación, esfuerzo y de solidaridad.
Pero también se está viendo lo frágiles que somos y la dependencia que tenemos de las personas que están a nuestro alrededor.
El esfuerzo que estamos haciendo es encomiable, pero sobre todo, los que se encuentran en primera línea de batalla.
Ese esfuerzo es agotador y se quedan cortos los aplausos que a diario se les dedica.
Nuestra misión y nuestra responsabilidad es tratar de seguir las recomendaciones al pie de la letra y permanecer en casa mientras dure esta situación.
Estamos hablando de salud y de vidas humanas.
Ahí es dónde se va a ver la capacidad de adaptación que tenemos todos, pero no solo para unos días concretos, que como estamos viendo la gente saca todo su arsenal imaginativo, sino nuestra capacidad de adaptación para una situación que se prevé larga y eso es lo que considero que es el verdadero reto.
Nuestra dosificación va a ser muy importante. Como los buenos ciclistas tenemos que saber medir nuestras fuerzas.
La repercusión económica que va a tener esta crisis también va a ser de un gran calibre y a todos, de una manera u otra, nos afecta y nos pasará factura.
Llegan tiempos difíciles, donde cada uno vamos a tener que sacar lo mejor de nosotros mismos.
Toda esta situación genera mucha inquietud.
Y trato de combatirla, cuanta más y mejor información tenga, mejores decisiones puedo tomar. Médicos, científicos, proveedores de alimentos, farmaceúticos, políticos y medios de comunicación tienen una gran responsabilidad en estos momentos.
Carmen se encuentra en situación vulnerable y tratamos de afrontarlo con todos los medios a nuestro alcance.
Al ser completamente dependiente, no es posible el mantener la distancia de seguridad, con lo cual, yo me convierto en su escudo y protección ante estas situaciones.
Hemos extremado todas las medidas de higiene y seguridad en nuestro entorno para tratar de protegerla al máximo.
Eso significa que tenemos que ser muy cuidadosos.
Mis hijos son los únicos que salen a realizar las compras necesarias (nunca habían tenido tantas ganas de hacer la compra e ir a la farmacia) para no ser yo el que salga a la calle y mantenerme como última barrera ante Carmen.
En este tiempo que voy a estar en casa he suspendido la entrada de las personas que nos ayudan.
Y toda esta situación genera miedo, claro que tengo miedo . Aunque me imagino que como casi todo el mundo, por eso, trato de convivir de la mejor manera posible con ello. Sobre todo, evitando que pensamientos irracionales puedan tomar el mando y ante situaciones que no dependen de mi, tratar de ser reflexivo y confiar en los profesionales para adaptarnos lo antes y mejor posible.
Es increíble ver cómo toda una estructura y un modo de vida que tienes organizado, cambia en unos instantes.
Como todo en la vida, esta situación pasará (esperemos que sea más pronto que tarde) y habrá dejado una huella en cada uno de nosotros.
De nosotros también depende el enfoque que le demos a esta situación, que nos sirva para reencontrarnos con situaciones que parecían abandonadas por la velocidad del día a día y nos demos cuenta de las cosas que para cada uno son realmente importantes, como personas y como sociedad.
La fragilidad de la vida.
Ánimo y paciencia para todo el mundo, pero especialmente para todas aquellas personas que cuidan a una persona dependiente y que en este tipo de situaciones tratan de hacer la vida un poco mejor a los demás.
Cuídate para poder cuidar
En estos momentos de aislamiento forzoso, se agradece mucho el poder estar en contacto.
Escribe en los comentarios cómo te adaptas a esta situación, cuales son tus temores, cómo te enfrentas a ellos.
Me ayuda mucho y seguro que ayudamos a los que lo leen.
32 Comentarios
¡Hola Javier!
Al igual que a ti me gusta esa palabra «resiliencia».
Soy bipolar y estoy afrontando situaciones adversas, gracias a tu blog he encontrado fuerzas para no rendirme, eres una persona admirable.
Gracias por compartir y ser luz en un mundo en tinieblas.
Gracias a ti Reynald por escribir, y gracias por tus palabras. Cada uno poniendo nuestro granito de arena seguro que todo va mejor. Saludos
Me encantaría ayudarte, que a la lejanía no sería más que con algún consejo o recomendación pero, después de leerte, veo que lo tienes todo tan claro que me dejas sin palabras. Sigue así. Fuerza!!!!
Un abrazo muy fuerte para todos.
hope
No sé qué decirte Javier….
Si para los que estamos solos ya es duro , no puedo imaginar cómo será para todas las familias que tienen en casa a personas dependientes,como Carmen.
Espero que todas las precauciones que estáis tomando sean eficaces.
Yo vivo sola , con mi perro Drago ?
A mis hijos y nietos no les veo,solo videollamadas , gracias a la tecnología ,mi miedos son mi hijo , Guardia Civil ,trabajando sin apenas medios , mis hermanos uno camionero internacional , y Eva trabajando en Alcampo , mis cuñados , espuestos al público también…..
Pero bueno , seamos positivos , y de ésta vamos a salir fortalecidos ,y esperemos que más empaticos y solidarios….
Un fuerte abrazo y mucha fuerza !!!❤️❤️❤️❤️
Muchas gracias por tus palabras. Esto va a cambiar muchas cosas y como dices, espero que salgamos y además fortalecidos. Mucha ánimo y besos para toda la familia.
Hola familia, nosotros vivimos un momento complicado. Con Pini muy enferma y Maria que no llega a los dos añitos. Encima somos sanitarios y el contagio es casi inevitable. De hecho no sé si no lo estaremos pasando o lo habremos pasado. Aqui no hacen pruebas ya. Nosotros trajimos a Pini a casa. Yo me quedo con las dos en casa desde el viernes. Pini lleva con.fiebre unos dias y Maria parece que ya está mejor. Pablo va al hospital todas las mañanas. Ahora es cuando me estoy dando cuenta de que realmente nos hemos hecho fuertes, duros y amigos de la palabra resiliencia. Lo demás está en manos de alguien mas poderoso que nosotros y sólo a él le corresponde decidir si esto sólo será una prueba más en el camino. Lo que me queda claro es que nuestra escala de valores ayuda mucho en momentos como este. Un abrazo muy fuerte para Carmen y para todos
Querida María, son momentos duros y difíciles. Además vuestra circunstancia hace que estéis en primera linea de batalla y tenéis toda nuestra admiración y la de todo un país. Gracias por vuestro esfuerzo y mucho ánimo para atender todos los frentes que tienes. Un fuerte abrazo.
¿Que te voy a decir Javier? Estos días he pensado mucho en vosotros. No se si CARMEN es una persona que está acostumbrada a estar en casa y no le acelera su carácter la reclusión. Imagino que vais subiendo peldaños de esa resiliencia de la que hablas porque es tensar una situación tensa ya.
Nos ayuda tu actitud, como siempre, y valoramos mucho lo que tenemos. Tana se vino a vivir con nosotros, así estamos los tres en compañía. De momento nos encontramos muy bien, afrontamos esta situación con positivismo esperando saber aceptar y adaptarnos a lo que venga. Muchos besos para los cuatro.
Muchas gracias Chica, a Carmen no se le ha alterado mucho su rutina diaria, a excepción de sus paseos. El temor es que pueda ser contagiada y ahí es donde estamos extremando las medidas. Me alegro que estéis los tres, en estos tiempos la compañía se nota y si es buena pues mejor. Besos para todos.
Buenas Javier,
Como siempre, aprendiendo de tu experiencia y visión de las situaciones difíciles. Pues como bien nombras en tu entrada, lo que mas me preocupa es «cuidarme para poder cuidar». En otro momento probablemente no estaría tan asustado, pero desde que tengo hijos, el valor de la Responsabilidad se ha desarrollado de manera increíble en mi cerebro. Pienso que tengo una gran responsabilidad de proteger a las personas que dependen de mí, y eso hace que sea mucho más cuidadoso en todo lo que hago, que anteriormente. Como lo combato? precisamente con dosis enormes de cariño desde y hacia ellos. Ahora tenemos la gran suerte de poder disfrutarnos muchas horas todos los días y eso de otra manera era impensable. Así que a menudo se me viene a la cabeza la frase: » Un héroe es quien entiende la responsabilidad que conlleva su libertad» (Bob Dylan)
Te vas haciendo mayor y las responsabilidades aumentan, pero sabiendo sacar rendimiento de cada situación como tú haces, demuestras muchas cosas. Un fuerte abrazo y ánimo.
Como siempre demuestras ser un gran luchador y Carmen tiene mucha suerte en tenerte a su lado. Nosotros afrontamos el encierro dando gracias a nuestro patio, ya que ahí es donde se desfogan mis salvajillos (Asier 10 y Julia 9). Hoy ya han empezado sus clases online y esto nos ha traído rutina, así que, después comemos, descansamos un poco y luego tienen que seguir con entrenamientos caseros para no perder la forma, ya que ambos están en equipos de competición. Luego cenamos y ¡Por fin! Se van a dormir. Un abrazo ya queda un día menos para que acabe este encierro.
Muchas gracias por contar tu experiencia. Contener y dar contenido a tus «salvajillos» tiene mucho mérito. Ánimo y a seguir así. Un abrazo
Buenas noches desde Paiporta (Valencia). Somos Kiko y Noemí y estamos en aislamiento desde el día 12 de marzo.
Kiko está bastante grave desde hace un año y medio, la enfermedad de Huntintong avanza muy rápido en él. Ahora estoy yo al cargo de todo ya que a la cuidadora le dije que también se quedara en casa. Pienso aguantar lo que sea necesario, cuando la semana pasada anuncié a los familiares de mi decisión hubo algunos que me calificaron de alarmista, a estas alturas ya me han dado la razón. Higiene, no visitas, y tranquilidad absoluta cara a Kiko. Las noticias las oigo yo en el salón con voz bajita. Para los recados tengo a mi sobrina que esta en la Uní pero con las clases suspendidas, aunque intento que salga solo una vez por semana. Para mi es fantástico poder pasar tanto tiempo con Kiko, ocuparme de todas sus comidas y aseos. Me lo tomo como una oportunidad. Ánimo a todos y muchos besos desde la distancia. Un abrazo muy fuerte a Javier.
Es magnífico lo que escribes Noemí, has tenido determinación y confianza en tus decisiones y además con espíritu positivo. Disfrutar de los que tenemos al lado es magnífico, ojala lo puedas hacer durante mucho tiempo. Gracias por contar tu experiencia, a mí me ayuda mucho. Un beso.
Bueno Javier y demás blogueros, pues sigo ciertas rutinas, cuando me levanto ,primero aseo personal, desayuno , realizo algo de»gimnasia» y ya me dedico a las tareas domésticas, en estos tiempos es importante la limpieza de toda la casa y como ahora hay tiempo pues hay que aprovechar. A la tarde es el tiempo de ocio, por lo general lectura y a las 20:00 salir a la terraza a aplaudir y luego cena. Así voy pasando los días. Salud para todos.
Gracias José por escribir. Organizarse y tener un día estructurado es muy importante para todos. Los enfermos de Huntington se desastibilizan mucho cuando tienen que cambiar esas rutinas. Un fuerte abrazo.
Muchísimas gracias Javier, por tus palabras, tu esfuerzo, tu ejemplo y tu solidaridad con las cuidadoras de Carmen.
Suspender la entrada en vuestro domicilio de las auxiliares que la asisten, causa un triple beneficio a mi entender: el primero, el de proteger a Carmen, la parte fundamental y más frágil de esta ecuación; en segundo lugar y de «rebote», a ti y tus hijos ; y en tercer lugar, a las auxiliares de la ayuda a domicilio que pueden cumplir la orden de quedarse en casa y también estar menos expuestas.
Te felicito por tu decisión y te agradezco el gesto y tanta generosidad.
Un abrazo fuerte para Carmen.
Ánimo y adelante. También esto pasará. Y seguiremos en la brecha.
Gracias Maribel, son tiempos difíciles pero intentaremos encontrar el mejor camino para todos. Le doy el abrazo a Carmen.
La situación es preocupante para todos y sobre todo para los que tenemos familiares dependientes. En nuestro caso contamos con una chica interna maravillosa que está asumiendo la mayor parte de los cuidados de mis padres para que mis hermanas y yo hagamos las menos visitas posibles y así evitar llevar algún tipo de contagio de nuestras respectivas casas. Se trataría de tres focos potenciales de contagio y eso es lo que queremos evitar, aunque manteniendo el contacto para la toma de decisiones constantemente a lo largo de todo el día. Realmente estamos ante una situación difícil para todos y que va a tener consecuencias, no sólo de salud, que se prolongarán en el tiempo. No olvidemos que muchos hemos dejado de tener ingresos y no sabemos por cuánto tiempo.
Querida Mariló, parece que viene tiempos difíciles y que vamos a tener que pelear mucho. Ánimo para toda la familia, seguro que vuestra sabiduría hará que encontréis las mejores soluciones. Un beso.
La situación se va a volver muy complicada, no solo para los que cuidáis a personas dependientes, (Javier eres un crack) si no para muchas familias desestructuradas, en situaciones conflictivas, con problemas de violencia de género. Cómo lo van a afrontar si tienen al tigre en casa y ademas las 24 horas del día.Al final vosotros cuidáis a vuestros dependientes con amor y cariño, pero cuando no hay amor ni cariño, y me confinas con gente (mujer, hijos) con los que no tengo ningún tipo de afinidad, ¿cúal va a ser el resultado? Espero confundirme y que en ese aspecto no se produzca también un repunte de actos violentos dentro del entorno familiar. Yo aconsejo, calma y racionalidad frente a la pandemia y sobre todo hacer uso de la negociación elemento fundamental en este momento,para los que tenéis hijos/as con vosotros porque esto va a durar y no ha hecho mas que empezar.Si queréis conocer mas ideas para aguantar estos días podéis entrar en mi blog http://www.divorciosinteligentes.com y ver mi ultimo artículo «nos quedamos en casa» en el cual doy una serie de consejos y una lista de series para que veáis con vuestros hijos/as y las comentéis con ellos/as si os apetece
. Besos y abrazos virtuales.
Esta crisis va a sacar muchas cosas a flote, buenas y malas. Espero que ganen las primeras. Gracias por escribir.
Antonio tiene un blog muy interesante en el que cuenta muchas cosas que creemos que sabemos pero la realidad es algo diferente. Lo recomiendo.
Hola Javier.
Mi encierro es con mi madre de 94 años, aunque físicamente está bien, es de riesgo y hay que proteger.
He vivido , por circunstancias de Salud, muchas temporadas de encierro, pero no es lo mismo. Ahora tenemos recomendadas la ausencia de visitas de familiares y amigos e incluso de la chica que nos ayuda. Sicológicamente es muy distinto . Un reto difícil de afrontar , pero es lo que toca . Y como dices habrá que habituarse .
Tenemos los teléfonos y “ los balcones” .!Qué curioso! , vecinos con los que antes un hola rapidito en encuentros en ascensores o portal, ahora llamadas y saludos de amplias sonrisas , ofrecimientos de los más jóvenes a hacer la compra a los mayores de la Comunidad .., De todo esto y de la solidaridad que aparece en situaciones extremas algo bueno saldrá.
Puedo imaginar tus miedos, cómo la estrategia de tu bien montado partido se tambalea y las dificultades aprietan, pero también me alegra leerte y saber cómo rápidamente te has adaptado y has buscado de nuevo lo mejor para Carmen . Eres admirable y tu inteligencia emocional no tiene límites . Te admiro y sigues siendo un ejemplo para todos los que nos podemos ahogar con cuestiones mucho más insignificantes.
Besos enormes. Muchísima fuerza y ánimo.
Gracias Yeyo por tus palabras, es dura esta situación para todos.Esta crisis va a hacer cambiar muchas cosas de la sociedad, espero que la mayoría sean para bien. Un beso muy grande y desde aquí nuestro ánimo para hacer de la situación lo más llevadera posible.
Gran reflexión, Javier.
Un abrazo muy fuerte.
Cuídate mucho.
Nacho Llorente
Muchas gracias, hago todo lo posible para poder cuidar bien. Un fuerte abrazo.
Bravo Javier. Bravo!
Ánimo y palante como decimos por aquí.
Cuando era costalero estaba prohibido rendirse. Se respiraba hondo y seguíamos.
Ese eres tú. Un pedazo de costalero que muchos quisieran llevar de compañero.
Miles de bss a Carmen de parte nuestra. Y miles de abrazos para ti (que te creías…) y tus hijos.
Paz y Salvador
Muchas gracias por tus palabras. Un buen deportista tampoco se rinde, así que seguiremos luchando como los costaleros. Besos y abrazos para vosotros.
Muchas gracias, Chinche por tus palabras. Gracias a Dios, tenemos patio y podemos salir a jugar y hacer deporte porque para los niños. 11 y 10 años, es complicado que entiendan la situación.
Por la mañana estoy liado con clases y hacenbque mi mente divague para no tener que pensar en que no puedo ni ver ni ayudara mis padres en sua quehaceres diarios.
De nuevo, gracias. Un abrazo, espero que nos podamos ver pronto.
Gracias a ti por escribir, espero que nos podamos ver pronto, eso será una muy buena señal. Un abrazo fuerte.